El Ferrocarril de General Cruz

Juan Ignacio Basterrica

Integrar el territorio de Chile a través del ferrocarril no solo fue el sueño de grandes estadistas sino también el de hacendados y empresarios que vieron en esta realización un avance significativo hacia el desarrollo económico y cultural de la nación.

Tal fue el caso de don Zenón Méndez Sepúlveda, agricultor y empresario, quien con el fin de revalorizar las extensas propiedades que heredara de su familia en la zona de Pemuco; los fundos madereros Cartago y Camarico, en la precordillera de ese lugar y así facilitar las explotaciones madereras y el transporte de su producción, inició las gestiones ante el Estado para obtener la concesión propia de un ferrocarril particular que cumpliera esos propósitos. Finalmente, logró su objetivo conectando el ferrocarril desde General Cruz a Pemuco, y proyectándolo hacia la localidad de Cartago y Camarico, abriendo la eventualidad de comunicar a la zona con la provincia de Neuquén en Argentina y así unir la línea desde allí a Bahía Blanca en el Atlántico.

La construcción del ferrocarril se realizó en dos etapas, la primera, desde General Cruz a Pemuco, fue inaugurada en 1908. La segunda, desde Pemuco a Cartago, en 1909, y su continuación a Camarico se inauguró en el año 1913.

Esto es solo el comienzo de una gran investigación realizada por Juan Ignacio Basterrica y que se sumerge en aspectos históricos profundos de Ñuble, vinculando numerosos antecedentes y dando mayor claridad sobre los sostenidos esfuerzos de múltiples visionarios por desarrollar el territorio.

Publicado en el 2014, es una obra muy relevante para comprender la historia de la región de Ñuble. Puede solicitarse en las bibliotecas públicas de la región o bien descargarse desde la página del Archivo Histórico de Concepción.